2 de julio de 2011

AUTOAYUDA



Autoayuda
1. f. Método o sistema de ayuda que uno puede prestarse a sí mismo para mejorar algún aspecto de su conducta o de su personalidad. (Diccionario RAE)

Se trata de consejos o recetas de vida que se supone son para ayudarse uno mismo. En los libros de autoayuda se dan criterios de cómo enfocar distintos tipos de problemas que hacen a la salud emocional de las personas. Se basan mucho en el autoconvencimiento que puedan lograr en los sujetos, más que en el conocimiento en sí mismo.
A los consejos que se dan le suelen llamar “filosofía de vida” y por este término confuso que queremos hablar aquí de esto. No es una filosofía, son solo consejos, veamos...
La autoayuda implica “recetas” sobre cómo actuar en distintas circunstancias. Se las lanza en libros que tienen un gran éxito de ventas porque prácticamente todo el mundo tiene problemas, porque vive y la vida tiene sus problemas y satisfacciones. Pero estimo que es irresponsable lanzar recetas universales iguales para todos, porque somos diferentes. Ni un psicólogo ni un psiquiatra serios pueden ignorar esto.
Generalmente buscan la autoayuda personas que padecen de conflictos internos no resueltos y necesitan un bastón donde apoyarse, algo que parezca “una razón” para seguir adelante. No buscan ayuda para resolver esos conflictos internos. No buscan esa razón dentro de sí mismos sino en algo externo. Y es muy importante el grado de convencimiento que logren (hasta la autosugestión) en lo acertado de las recetas (fe).
Por ejemplo, para algunos los consejos de una congregación religiosa pueden ser valiosos, para otros no. Pero hay libros para todo tipo de lectores y a veces aciertan con el sujeto al que se dirigen.
Razonando, llegamos a que los “consejos de vida” son el resultado de:
·        Conocimientos de psicología

·        Conocimientos de filosofía y una cierta selección de valores.
·        La urgencia de éxito económico o de prestigio del autor. Más que profesionales, suelen ser comerciantes psicológicos.
Filosofía
La filosofía es otra cosa, es conocimiento fundamentalmente, desde las perspectivas más amplias posibles, abarca la historia, el conocimiento científico, la ética. Pero no es psicología.
La filosofía no da consejos de cómo vivir, la filosofía pretende conocer sobre la vida, sobre el hombre y su historia, pero sin ninguna atadura, sin los límites que nos impone la división del saber en disciplinas, en compartimientos estancos.
Por ello el filósofo puede interesarse en las actitudes humanas en general y en distintas circunstancias. Se interesa por ello de la ética y de la moral; también de la antropología, de las teorías de la evolución, de la ciencia y su método, pero por sobre todo del hombre en su medio y en su tiempo. También se interesa de la estética y su evolución en el tiempo, de la ciencia política, de las utopías del hombre, de sus mitos; del lenguaje y su relación con los conceptos; de la lógica y de la matemática; de los sistemas sociales y de todos los sistemas, especialmente de los que tienen al hombre como partícipe. En definitiva, la filosofía no tiene límites.
Autoayuda de la filosofía
¿Entonces la filosofía no sirve de guía al comportamiento humano? Sí, sí sirve, pero lo hace indirectamente, a través del conocimiento, del crudo conocimiento. Y tiene la ventaja de que lo hace desde una perspectiva sumamente amplia, tanto como podamos. Con la filosofía una persona saca sus propias conclusiones y elabora sus determinaciones de cómo vivir mejor para él y la sociedad, no se basa en recetas dadas. Con el conocimiento se logra equilibrio y tranquilidad; se neutraliza el bombardeo mediático sobre el deber ser y pensar y los prejuicios de la herencia cultural. En definitiva, nos hace más libres.
Pero si el problema individual está no en la formación sino en problemas psicológicos, lo mejor es un buen profesional, que puede ser un psicólogo o un psiquiatra, según el caso. Pero profesionales serios, no exitistas.
Conclusiones
  • La filosofía de vida, tal como se usa vulgarmente, es un término inadecuado.
  • La llamada autoayuda puede servir a determinadas personas o ser solo una pérdida de tiempo.
  • Si hay problemas psicológicos, lo correcto es acudir a un buen profesional psicólogo o psiquiátrico según sea el caso.
  • La filosofía ayuda muchísimo, cuando el problema es de mala formación del individuo. Da elementos para que una persona ordene sus pensamientos por sí mismo y tenga una visión global de la vida. Las actitudes que deriven de esto pueden ser muy provechosas.
 Tuco.

Nota: Si tienen algún aporte que hacer, les agradeceré lo inserten en Comentarios, así lo pueden ver todos los lectores. Gracias.