19 de septiembre de 2006

¿La filosofía es totalizadora?


(Repuesta a una intervención en un foro de filosofía).

Filosofía totalizadora.
Según entiendo, desde sus inicios la filosofía trató de ser lo más totalizadora posible, en el sentido de buscar respuestas lo más abarcadoras posibles. Se buscan principalmente las verdades más generales, los principios. Tampoco hay límites al campo de la filosofía. Las ciencias estuvieron también en un principio dentro de su terreno, hasta que adquirieron su mayoría de edad. Son hijas de la filosofía en este sentido y en ellas también se buscan las fórmulas más generales, las que en forma más sencilla expliquen el comportamiento natural.

La filosofía, más que pensamiento individual, es pensamiento de un individuo en una época, lugar y con una cierta historia. Nace en el individuo, pero se nutre de las circunstancias del entorno y gran parte de ese entorno es histórico. No se puede evitar. Filosofar es una tarea individual y también social, querrámoslo o no.



Todo pensamiento valedero entiendo que viene de nuestra praxis, se elabora en nuestra mente y vuelve a la realidad, si se es coherente. Si no se tiene en cuenta la realidad como juez verificador, se puede decir cualquier disparate.

Como gran ejemplo, citemos la ética, que nace de los juicios de valor que vamos elaborando de nuestra interacción con la sociedad, desde niños. Y esa sociedad tiene cierta historia y los conceptos éticos estarán acordes con la época. Es que la ética no es sino una herramienta para vivir mejor en sociedad, en la sociedad en la que estamos en cierto momento.

Claro que también la ética puede nacer de una imposición, o mejor dicho porque nos dejamos imponer una moral ajena, sin preguntar, sin cuestionar, y sin convencimiento real, lo que llevará a que dejemos de lado a esa moral cuando no nos convenga, nos haremos los olvidadizos o miraremos para otro lado, como ocurre frecuentemente en nuestro país.


Creo que Lucas confunde el concepto de totalizador con el de totalitario, pero de eso nadie que yo sepa habló en el reportaje a Feinmamm.

Convicciones

En cuanto a las convicciones, creo que es algo indispensable, saludable, para todo ser humano, es una de las cosas que buscamos y es lo que sostendremos hasta que encontremos algo mejor, pero es indispensable que las tengamos porque forma parte de la guía individual de nuestro actuar. No podemos vivir saludablemente en la incertidumbre permanente. Ver Creencias, selecciones y decisiones.

Colaborar en la búsqueda de cierta felicidad terrenal


O sea, colaborar a crear mejores condiciones de vida que permitan que el hombre aproveche mejor su existencia en el corto período desde que nace hasta que muere, que pueda aprovechar mejor lo que tiene, una vida efímera. Me parece muy loable, digno de todo ciudadano sensible socialmente.


Para esto es esencial conocer el mundo en el que vivimos y comprometernos con él. Es mediante el conocimiento que nos haremos más libres. Y para conocer no hay nada mejor que aplicar un método de conocimiento que haya sido exitoso, como el método hipotético deductivo, que basa el conocimiento en la actividad humana y en la razón (ver método científico). Para mí es esencial para esto entender que todo es natural. Hasta los fenómenos más extraños. No hay nada sobrenatural. Esto no es un dogma sino una conclusión de nuestra experiencia.

Felicidad


Alguien la definió sintéticamente como “amar y trabajar” (SF). Según otro (EF), logramos la felicidad cuando logramos reintegrarnos a la naturaleza, mediante la acción modificadora (dominio) o la sumisión. Explica que nuestro drama nace desde que tenemos uso de razón, memoria, conciencia. Considera luego que algunas formas son socialmente deseables y otras no. Dentro de las deseables está el amor, no sólo de pareja. Y la acción transformadora, creadora.


Claro que si hablamos de quien no tiene las necesidades básicas, comida, techo, abrigo, agua, etc, todo lo que se dice en el párrafo anterior parecen pavadas, las necesidades básicas nos transforman en sólo animales más, satisfacerlas es el fin principal.

Éstas son mis convicciones sobre esos puntos, escuetamente desarrollados, a pesar de haber leído solo un poco de Niestzche, algo de Sastre y nada de Heideger. 

Saludos, Tuco Navarro.